El Gobierno dispuso un nuevo límite estricto a la cantidad de internos en las cárceles que podrán percibir una remuneración por la realización de las tareas de mantenimiento. Detallaron que, quiénes no entren dentro de este grupo igualmente deberán cumplir con esas obligaciones como «parte de su régimen de convivencia».
La Resolución 429/2025 se hizo oficial a través de su publicación en el Boletín Oficial de la fecha. Además, estipula un nuevo tope sobre la cantidad de presos que acceder a las tareas que recibirán una remuneración.
La medida del Gobierno busca disminuir considerablemente la cantidad de presos a los que se les podrán asignar la realización prestaciones personales para labores generales del establecimiento o comisiones como única ocupación. Así, con los nuevos límites, estas tareas solo podrán ser otorgadas al 5% del Servicio Penitenciario Federal que no lleven a cabo actividades con objetivos productivos a los fines de la reinserción social.
A pesar de las modificaciones, desde la cartera de Seguridad aseguraron que la nueva medida no modifica la obligatoriedad para todos los internos alojados en el Servicio Penitenciario Federal de participar en las tareas de mantenimiento, limpieza, aseo e higiene de los espacios propios y comunes de los establecimientos penitenciarios. Esto fue dispuesto así por la Resolución 1346/2024 del 16 de diciembre de 2024.
Con el nuevo régimen, aquellos a los que se les asignen las tareas deberán cumplir un mínimo de 8 horas diarias y se les otorgará peculio – dinero o bienes particulares – que será distribuido conforme está establecido en el artículo 121 de la Ley N° 24.660.
Anteriormente el tope de presos que podían acceder a estas tareas era de 61,28%, lo que refleja una disminución considerable. Desde la cartera de Bullrich aseguraron que la medida «busca eliminar privilegios, ordenar el sistema penitenciario y garantizar que el trabajo real y el esfuerzo personal sean condiciones necesarias para acceder a un ingreso».
La resolución se enmarca en el programa Manos a la Obra, lanzado en octubre del año pasado por Bullrich, que busca reestructurar el esquema de trabajo penitenciario. “No vamos a aceptar que se cobre por no hacer nada. Se terminó la injusticia de premiar a quien incumplió la ley con el dinero de los que trabajan todos los días. Distinguir entre quienes cumplen y quienes no es el primer paso para recuperar una sociedad ordenada y segura”, afirmó Bullrich.
La medida también apunta a eliminar la figura del “fajinero”. Ya se dieron de baja a 750 puestos de fajina que son avaladas por la justicia.
La dirección nacional del Servicio Penitenciario Federal deberá informar «en forma mensual a la subsecretaría de Asuntos Penitenciarios» las sumas de dinero destinadas al pago en concepto de peculio por la realización de actividades con objetivos productivos a los fines de la reinserción social y por la realización de prestaciones personales para labores generales del establecimiento o comisiones.
Fuente: Ámbito Financiero