Un efectivo que no estaba de servicio disparó a Matías Rodríguez de 16 años, en la zona de plaza Virreyes el pasado miércoles. La versión oficial habla de un asalto, mientras organismos de derechos humanos denunciaron el caso de gatillo fácil.
El miércoles por la noche, un policía que no estaba de servicio asesinó por la espalda a Matías Rodríguez de 16 años, en la zona de plaza Virreyes, en Capital Federal. El adolescente fue trasladado al hospital Piñero donde fue atendido de urgencia pero no logró sobrevivir. Cinco tiros recibió de parte del policía, uno de ellos en la cabeza. Al momento no se sabe cuándo le entregarán el cuerpo a la familia, debido a que la causa cambió la carátula de “hurto” a “homicidio”, ya que no se encontraron armas de fuego que justifiquen un enfrentamiento pese a las versiones oficiales sobre un supuesto intento de robo. El repudio de los organismos de derechos humanos y la comunidad educativa.
Hasta el año pasado, Matías era estudiante del primer año de la secundaria en el EMEM 3 DE 19 “Prof. Carlos Geniso”, un secundario del Bajo Flores que se fundó como un reclamo de los vecinos para que exista una escuela secundaria en el barrio. Matías iba al EMEM desde chiquito, al club de jóvenes que funciona los sábados en esa institución como herramienta para que los chicos no estén en la calle y tengan un plato caliente el fin de semana.
Sus amigos de barrio y del colegio le decían ‘Plo’ porque de chiquito no le salía decir ‘profesor’ y cambiaba la ‘r’ y, aunque gracias al trabajo con fonoaudiólogos logró modificarlo, el apodo le quedó para el resto de su vida. Recién el miércoles de la semana que viene, la fiscalía interviniente le dirá a los familiares cuando pueden retirar el cuerpo de la víctima.
“El miércoles 25 de abril, Matias Rodríguez, un pibe de 16 años y ex alumno de la escuela 3 del 19 del Bajo Flores, fue asesinado por un efectivo policial que se encontraba fuera de servicio en Virreyes, Lugano», denunció la comunidad educativa, acompañada de múltiples organizaciones sociales, culturales, de derechos humanos y gremiales. «Matías no se encontraba armado y no disparó como intenta instalar la versión policial», sentenció el espacio multisectorial. «Fue asesinado por la espalda por un policía que justificó su asesinato por un presunto robo. Se trata de un nuevo capítulo de la doctrina Chocobar», se explicó en un comunicado firmado entre otros espacios por la Asociación Demonty, UTE, Agencia Paco Urondo, Flores Solidario, Frente de Abogados Populares, Familiares y Amigos de Luciano Arruga, ATE Capital, Red Argentina No Baja, Red de familias, docentes y organizaciones del Bajo Flores, Murga Herederos de la Locura, Murga Maestra, Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, Asociación Contra la Violencia Institucional, Asociación Civil Miguel Bru, Coordinadora Argentina por los Derechos Humanos, Madres de Plaza de Mayo Taty Almeida y Carmen Lorefice, Madres en Lucha, Barrios x Memoria y Justicia Balvanera, Centro Educativo Comunitario Dr Ramon Carrillo, Centro de estudiantes del normal 4, Centro Angelelli, Colectivo de Medios de Comunicacionales y la Casa De Derechos Osvaldo Bayer.
“Esto ya pasó en los 90, los dejan hacer y cuando se están yendo los matan por la espalda. Los 90 son una lista de pibes fusilados por la policía», recordó el comunicado colectivo, también respaldado por numerosas organizaciones políticas y partidarias. Rememoró épocas como el 2000 que se caracterizaron por «un ir y venir al cementerio enterrando pibes que son la carne de cañón entre el comercio de drogas y el peligroso oficio de robar turistas que caen a comprar, más las idas a comisaría por las desapariciones de las pibas que se llevan al fondo, que no es tan al fondo, es ahí no más, pero donde nunca llegan los comisarios fuera de servicio a hacer justicia por mano propia para devolverlas a su familia», ironizó el escrito.
«Entre las zonas liberadas y las zonas apropiadas, entre el trazado formal y el informal, los cuerpos de lxs pibxs funcionan como hitos que marcan con su sangre las fronteras invisibles que advierten sobre los peligros de haber salido del domo, de haber seguido el anhelo de querer arrebatarle a esta vida perra una tajada que nunca va a llegarles por esperar pacientemente del otro lado de la raya», puntualizó el comunicado.
«Se dice que ahí no llega el estado, como si se tratara de un territorio librado a sus propias fuerzas, habitado por «malos salvajes» que se matan entre ellos. Que idea tan hipócrita», denunció el espacio multisectorial. «El estado ahí es la gendarmería, los comisarios fuera de servicio, los negocios intocables de la droga y la circulación de pibas, el pan que se quita, la vacante que se niega, las ambulancias que no llegan, las armas accesibles y los cuerpos matables y desaparecibles de lxs adolescentes, ahí la ley funciona a rajatablas y la menor infracción se paga con la vida», se detalló. «El estado también es este disciplinamiento que nos quiere imponer que lo único que podemos hacer es juntar la guita para pagar un cajón donde enterrar al niño», se lamentó.
“A todo eso respondemos con la poderosa certeza de que otro mundo es posible para nuestrxs pibxs, que sabemos y comprendemos las eternas carencias que atraviesan. Respondemos exigiendo políticas públicas que los saquen de la pobreza, exigiendo más escuelas, exigiendo viviendas dignas, exigiendo el pan de cada día, exigiendo trabajo para sus padres y para ellos, exigiendo teatros, cines. Exigiendo justicia y que dejen de fusilarlos (que acto mas cobarde)», pronosticó el comunicado. «Cuando un gobierno justifica el asesinato por parte de las fuerzas de seguridad de sus jóvenes ese gobierno es fascista. Sepan que a pesar de ser una pelea tan tremendamente desigual algún día tocaremos la dignidad con las manos y que el destino no es la muerte sino una vida plena para todxs”, se afirmó.
Fuente: Antena Negra y AnRed