Andrea Filiberto: «Estar organizados para visibilizar su maquinaria de impunidad»

El pasado 2 de marzo Sergio Filiberto, Fernando Latorre, Franco Pizarro, Alan Córdoba, Juan José Cabrera, John Claros y Federico Perrota fueron masacrados durante un incendio desatado en la Comisaría 1° de Pergamino. Sus familiares y los organismos de Derecho Humanos afirman la existencia de varias pruebas que demuestran que el incendio pudo evitarse en reiteradas oportunidades. A ocho meses del hecho, la impunidad continúa.

«Todos los días 2 revivo el dolor de cuando empezó esta pesadilla, un dolor que llevaremos por siempre», explicó Filiberto sobre el aniversario de un nuevo mes sin respuestas ni avances en la investigación. «Desde esa masacre el 2 de marzo de este año, en que los policías a cargo del lugar no usaron los matafuegos para salvar a los nuestros, no les abrieron las puertas e hicieron lo que quisieron con los restos de ellos, supimos que no podíamos dejar pasar ni un día sin hacer nada», detalló la hermana de Sergio. «Sabíamos que si no nos movíamos rápido, la causa quedaría en la nada. Han pasado ocho meses y no hemos iniciado el duelo», lamentó uno de los tantos familiares que comenzaron desde marzo un recorrido de lucha y resistencia.

«En todo este tiempo nos dimos fuerza entre las siete familias. Con toda esa unión, nos dimos cuenta que para evitar que esto quede en el olvido, era importantísimo estar organizados para visibilizar su maquinaria de impunidad», señaló Filiberto. «Desde que mataron a nuestros pibes, hemos atestiguado la falta de compromiso de los políticos: nos obligaron a conseguir 1500 firmas para darle lugar a nuestro reclamo en el Anexo A de la Cámara de Diputados», precisó y agregó que denunciaron ante el Poder Legislativo «que la Policía Bonaerense es de terror, algo que no quieren oír».

Recordó que igual de repudiables «fueron los fallos del juez que le concedió arresto domiciliario a los oficiales Alexis Eva, Carolina Guevara y Ezequiel Giugliett, al sargento Cesar Carrizo y  e¿al teniente primero Juan Rodas. Además de los pocos avances en la captura del comisario prófugo, Alberto Donza».

«La justicia somos nosotros y si no les hacemos frente, con los chicos van a hacer lo que quieran», expresó. Y afirmó que «no fue un accidente: todo lo contrario, los mataron». Pidió que conozcan las historias de sus siete hijos, sobrinos, hermanos, «que no son “siete lacras menos”, son siete historias que nos asfixiaron, y que los quemaron vivos, se las llevaron para siempre».

Advirtió que siempre los rescordarán. «Franco, Federico, Fernando, Alan, Juan, Sergio y John, sus gargantas nunca serán calladas», finalizó en declaraciones a La Garganta Poderosa.