Estudiantes de Comercio I de Paraná realizaron una actividad en la calle ante la negativa de los directivos

Querian realizar una intervención sobre La Noche de los Lápices, pero se les negó que lo hicieran dentro del establecimiento, por lo que resolvieron hacerla frente al ingreso. Mientras realizaban la pintada, la rectora clausuró la puerta.

Foto: AgendaAbierta.

Por Pablo Urrutia.

En medio de las noticias y el debate acerca de si temas relacionados a Derechos Humanos deben ser tratados o no dentro de la escuela, un llamativo hecho sucedió en la ciudad de Paraná. Estudiantes de la Escuela de Comercio I, ubicada en Avda. Ramírez y Manuel Urdinarrain de la capital entrerriana debieron realizar una actividad sobre La Noche de los Lápices, en la calle. Ello, según indicaron los jóvenes, debido a que los directivos les negaron una fecha para llevar adelante la intervención dentro del establecimiento.

Ante esa situación, los estudiantes referenciados en el Centro de Estudiantes de ese colegio del nivel secundario, decidieron realizar una pintada alusiva al terrible hecho sucedido durante la última dictadura cívico–militar en la Argentina, sobre la propia calzada de calle Urdinarrain, frente a la puerta de ingreso al establecimiento con el objetivo de hacer visible la acción al resto de sus compañeros, tanto del turno mañana como de la tarde. Al advertir lo que estaba ocurriendo, la rectora Prof. Sonia Heit, ordenó directamente clausurar ese ingreso. En diálogo con AgendaAbierta, los jóvenes relataron además que debieron soportar durante el tiempo que duró la actividad que incluyó además una radio abierta, la permanente vigilancia policial, “incluso pasaron con su patrullero por encima de lo que estábamos pintando”, aseguraron.

Eva Beziner, estudiante de 6to año de la Escuela Secundaria nº36 (Ex Comercio I) y vicepresidenta del Centro de Estudiantes, relató lo sucedido: “El plan era realizar una actividad de reflexión, con puesta en común y expresión de lo debatido en carteles y retazos de tela”, dijo y aseguró que “para llevarla a cabo enviamos una nota, repetidas veces, a rectoría. Desde el equipo directivo se nos negó la posibilidad de que se hiciera esto, con el falso argumento de ‘no tenemos fechas disponibles’”, señaló.

Continuando con el relato, Eva, expresó que tuvo acceso a la agenda de actividades, “contaban con 2 días disponibles”, observó y acotó que el argumento de los directivos fue que “los chicos tienen que tener clases y aprender”. “Como si lxs pibes no aprenden con las intervenciones y las conmemoraciones a este tipo de sucesos”, reflexionó la joven estudiante a la vez que manifestó: “Desde el Centro, consideramos como algo muy importante el aprendizaje de lucha, de defender nuestros derechos y homenajear a lxs compañerxs que fueron lxs precursores de todos nuestros logros”.

Entre los argumentos de las autoridades educativas para sostener la negativa a la solicitud del Centro de Estudiantes,  Eva Beziner, mencionó que “se nos dijo que no era necesario esta actividad, debido a que una profesora dijo palabras alusivas al respecto, cerrando con ‘su única obligación y preocupación es estudiar’”.

Para este grupo de jóvenes que concurren a la Escuela Secundaria Nº36, los argumentos de los directivos, “eran excusas para no hablar de Derechos Humanos, como ya nos pasó con el 2×1, cuando no nos permitieron marchar, a pesar de que el CGE aprobaba la convocatoria”.

De esa situación surgió la idea de realizar “la pintada de la calle, las intervenciones musicales y el micrófono abierto”. “Para asistir, faltamos a clase, al difundir nuestra convocatoria le aclaramos a lxs estudiantes la necesidad de faltar para poder asistir”, aclaró la dirigente estudiantil. Y la acción de las autoridades de la escuela, volvió a sorprenderlos: “La institución envió un comunicado mediante el cuaderno de comunicaciones, desligándose de toda responsabilidad al respecto de esta actividad”, dijo Eva.

La actividad se llevó delante de todos modos, pero al advertir la situación, la rectora decidió clausurar el ingreso que da a calle Urdinarrain, donde el grupo de estudiantes realizaba la intervención. “A lxs pibes se les dijo que estaban pintando la entrada para arreglarla, y para evitar molestar a los pintores (no existían tales pintores, sólo estábamos nosotrxs)”. “Claramente deseaban evitar que lxs pibes vean que estamos activos y que no nos van a callar”, acotó.

También agradeció “a todxs lxs que se acercaron, dieron una mano u ofrecieron unos mates”, durante la actividad.

“Siempre nos dicen que somos muy chicxs para opinar de estas cosas”

Eva Beziner, es militante y vicepresidenta del Centro de Estudiantes, del cual participa desde 2015, cuando ocupó la secretaría de Derecho, y el año pasado fue presidenta del Centro.

En diálogo con AgendaAbierta, indicó que “el motivo por el cual elegimos La Noche de los Lápices, es que como estudiantes en lucha, formando parte del Centro de Estudiantes, vemos el suceso como una parte histórica de nuestra formación. Lxs compañerxs secuestradxs esa noche, estaban luchando por un boleto estudiantil gratuito, y por una mejor educación, luchas que nosotrxs continuamos, y sentimos que es su legado. Hay que recordarlos, siempre, no podemos quedarnos calladxs, y si nos cierran las instituciones, nos van a ver en la calle cumpliendo nuestro deber, el recordar y abrazar a lxs compañerxs desde nuestro lugar”, dijo.

A su entender, “nuestra lucha no está desconectada a todo lo que sucede en el resto del país”.

“Que nuestra escuela no nos deje hablar de DDHH, mientras en otras escuelas denuncian activismo político, y en capital están siendo tomados una banda de colegios en repudio a la reforma educativa, que pretende entregarnos al sistema como mano de obra barata, nos hace ponernos a pensar. Siempre nos dicen que somos muy chicxs para opinar de estas cosas. Que la currícula la deciden los grandes y los que saben. Nosotrxs sabemos. Podemos y debemos opinar sobre los contenidos y las dinámicas de nuestra educación”, sostuvo Eva Beziner.