Demandan a una empresa de agroquímicos por la muerte de un trabajador

El ingeniero agrónomo Cristian Perno falleció en 2012 a causa de una enfermedad medular. Su familia culpa a las sustancias tóxicas que manipuló cuando trabajó para Agroservicios Pampeanos.

Los familiares de Cristian Perno denuncian por daños y perjuicios a Agroservicios Pampeanos, la empresa donde trabajó durante años, sometido a distintos riesgos por la toxicidad de los agroquímicos. Cinco años después de su muerte, la causa llega a instancia judicial, específicamente en etapa previa a instrucción en el Juzgado Laboral Nº7 de Rosario, a cargo del magistrado Marcelo Gallucci.

Gustavo Bruno, abogado de la familia, explicó que existe un informe médico que da cuenta que la enfermedad que afectó y terminó con la vida de Perno -mielodisplasia- está directamente relacionada con la exposición a sustancias químicas.

“Se hizo una pericia química, una médica y una de higiene y seguridad industrial. Adjuntamos informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de Greenpeace”, apuntó el abogado. Bruno explicó también que el único antecedente similar se dio en la provincia de Córdoba, donde se condenó a una empresa por los daños que causó a los empleados. “Son mínimos los antecedentes porque se trata de un negocio muy importante”, opinó.

En el año 2007 el ingeniero Cristian Perno comenzó a trabajar en Agroservicios Pampeanos, perteneciente al grupo canadiense Agrium. La empresa, que llegó al país en 1995, se dedica a brindar asesoramiento a productores agropecuarios y comercializar agroquímicos, fertilizantes y semillas.

Por ese motivo Perno se dedicó visitar campos, aportando sus conocimientos a los clientes y vendiendo los distintos productos que proporcionaba la compañía. Durante un tiempo trabajó en la localidad santafesina de Las Parejas y luego fue trasladado a Villa María, en Córdoba.

Sin embargo en 2010 decidió mudarse a Rosario para hacerse estudios médicos ya que había notado un deterioro en su salud. Allí le diagnosticaron mielodisplasia y los especialistas apuntaron en su informe que la misma se debía a la exposición a los agroquímicos, tal como consta en la causa judicial.

Luego de exponerse a quimioterapia, en 2011 le realizaron un trasplante de médula que resultó exitoso y volvió a trabajar, aunque en funciones administrativas. No obstante, en 2012 tuvo una recaída, las células cancerígenas reaparecieron y debió ser nuevamente trasplantado. Esta vez su cuerpo no respondió de la misma forma y terminó falleciendo en noviembre de ese año, a los 35 años.

“Él era una persona sana. Había sido futbolista y continuaba haciendo deportes. Ese tipo de enfermedades no es común en gente joven”, contó Mariana, su esposa. “Al tiempo nos enteramos que un camionero que transportaba los productos de la empresa para la que trabajaba Cristián falleció a causa de otro tipo de cáncer”, añadió.

Además denunció que ella “veía que la empresa no le daba ningún tipo de indumentaria especial” y tenía que usar “unas botas y unos guantes que eran suyos, pero la empresa no le proveía ningún tipo de uniforme”.

La presentación de la causa se hizo en 2014 y el abogado Gustavo Bruno estimó que podría haber sentencia recién en 2018.

El uso de agroquímicos -también llamados agrotóxicos- en nuestro país ha generado importantes denuncias de parte de organizaciones políticas, sociales, ambientales y pueblos fumigados organizados donde los casos de cáncer se dan por encima de la media. Sin embargo hasta el momento se sigue utilizando y está amparado por la legislación vigente.

Belén Masello y Antonella Pisetta señalaron en un artículo en este mismo portal que “son aproximadamente 300 millones de litros de agroquímicos que se utilizan por año en el país, que están intoxicando hasta la muerte a las 12 millones de personas que viven en zonas rurales”.

Fuente: Notas