Leonel y su sueño Olímpico

El paranaense Leonel Gómez representará al Club Atlético Libertador San Martín en la Copa del Mundo Wuko-Ad, que se disputará del 11 al 13 de noviembre en Morón, Buenos Aires.

Por Gustavo Dreiszigacker

Leonel es un gurí de barrio, cómo cualquier otro. Él va a escuela, cómo cualquier otro. Le gusta juntarse con sus amigos, cómo cualquier otro. Leonel tiene un sueño, cómo cualquier otro. Cómo aquella vieja imagen de un joven Maradona deseando jugar un mundial, el de Leonel “es poder estar algún día en los Juegos Olímpicos”.

A partir de este viernes 11 de noviembre y hasta el domingo 13, Leonel competirá con, y no contra, un grupo de pibes de muchos países que al igual que Leonel tienen sueños vinculados al deporte. En Morón, Buenos Aires, se disputará la octava edición de la Copa del Mundo Wuko-Ad, y entre los chicos de 13 y 14 años con cinturones marrones y negros estará Leonel, el vecino de Paraná que asiste al Club Atlético Libertador San Martín.

Las expectativas “son revalidar el tercer puesto e intentar salir mejor”, ya que de hecho este joven ha estado más cerca que cualquiera de nosotros de lograr su sueño. Leonel compite en la especialidad formas, donde “lo que prevalece es la velocidad, potencia, posiciones de las piernas, entre otras”. En 2015 fue llamado para viajar con la selección argentina a Indonesia y Tokio pero por cuestiones de dinero no pudo viajar, sin embargo asegura que vestir la celeste y blanca “es una experiencia inolvidable”.

La mejor forma de graficarlo es posicionarnos nosotros, “los grandes”, “los viejos”, en un chico de 13 y 14 años. Aunque representa una tarea complicado por los vicios que adquirimos con los años, el deporte, el arte y la educación serán siempre la mejor forma de escapar de la droga, la violencia y los problemas que como sociedad nos aquejan día a día. Seamos como Leonel y hagamos siempre un poquito más, para que los pibes puedan seguir soñando.

Leonel, no es Messi, él es karateca, su apellido es Gómez y parte a cualquier lado con una mochila cargada de ilusiones para domar cualquier tatami. Éxitos Leo, buen viaje.