Mientras los movimientos sociales junto a la CGT y las CTA se preparan para marchar al Congreso reclamando la aprobación del proyecto que tiene media sanción del Senado, el oficialismo busca evitarle al Presidente el costo político del veto.
La Ley de Emergencia Social, impulsada por la Central de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Barrios de Pie, el Movimiento Evita, las dos CTA y la CGT, logró el apoyo de toda la oposición en el Congreso. Este miércoles, los senadores aprobaron el proyecto con 45 votos a favor y 13 en contra. Pero el presidente de la Cámara, Federico Pinedo, que reemplaza a Gabriel Michetti de viaje por su visita al Papa, frena el envío a Diputados para evitar su tratamiento durante este año.
El bloque del Movimiento Evita, liderado por Leonardo Grosso, envió una nota a la vicepresidenta Gabriela Michetti en la que exigió que la iniciativa llegue a la Cámara baja para su tratamiento, un pedido que fue acompañado por las progresistas Victoria Donda y Alcira Argumedo. “El Senado ya debería haber mandado a Diputados la media sanción, pero Cambiemos quiere meterla en el freezer”, se quejó Grosso.
La estrategia del oficialismo en las cámaras es la mima que desarrolló durante el tratamiento de la Ley Anti Despidos, demorar el giro a Diputados y dilatar el tratamiento. Aunque en aquella ocasión no pudo evitar que fuera aprobada y el presidente Mauricio Macri, debió cargar el costo político de vetar la Ley, en este caso, los tiempos juegan a favor de Cambiemos. Tras la demora, la oposición no podrá reunirse en comisiones para dar dictamen al proyecto y así poder aprobarlo por mayoría simple en la Cámara de Diputados, donde todos los legisladores de la oposición ya garantizaron su apoyo. Sin dictamen, se necesitan dos tercios de los votos para el tratamiento sobre tablas, lo cual le deja el camino despejado a Emilio Monzó, jefe de la bancada oficialista, para hacer valer su bloque y evitarlo en las dos sesiones ordinarias que restan hasta fin de año.
De esta manera, los diputados de Cambiemos, junto con el presidente del Senado, buscan trabar la sanción de la Ley que dispone un aumento del 15% de los planes sociales y las asignaciones y obliga al Ministerio de Desarrollo Social a crear 1 millón de puestos de trabajo, utilizando las cooperativas. Que de ser aprobada pondrá nuevamente al presidente Macri ante el dilema del veto, con su consecuente costo político en un momento de relativa debilidad de la fuerza de gobierno.
Este viernes, la Central de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Barrios de Pie, el Movimiento Evita, las dos CTA y la CGT, se movilizarán al Congreso para tratar de presionar la sanción de la Emergencia Social.