En Página hace tres meses que se vienen realizando paros y retiro de firmas. En Tiempo, Martinez Rojas, supuesto comprador, pidió el desalojo del diario convertido en cooperativa. En Radio América temen por los puestos de trabajo.
La situación de trabajadoras y trabajadores de medios audiovisuales y gráficos expone la carencia de regulación en el sector, como en todo el mercado de comunicación. El vaciamiento del Grupo 23, deja vu de lo ocurrido con Diario Crítica, la histórica amenaza a la representación sindical en Clarín, La Nación y Perfil, el cambio de dueños sin la garantía de los puestos de trabajo, la velocidad de la competitividad por encima de una propuesta con rigor periodístico, marcan el escenario que aún no se logró diversificar ni regular, pese a algunos intentos fallidos.
Página 12
Desde mayo trabajadores del diario vienen exigiendo una recomposición salarial, luego del precario acuerdo alcanzado de 27% en trece meses. Una conciliación obligatoria, solicitada por la patronal, el Grupo Octubre, impidió continuar con las medidas de fuerza. Actualmente hay paros de 24 hs semanales y retiro de firmas del cuerpo periodístico hasta que aparezcan las respuestas del sector empresario.
El miércoles 5 fue la última acción, en el marco de un proceso complejo durante este año para las paritarias en general. Sus trabajadores esperan una mejora al magro acuerdo alcanzado a principio de año que repare la pérdida del poder adquisitivo y el proceso inflacionario disparado por la devaluación.
Radio América
La situación de la emisora es aún más complicado. Parte del vaciamiento del Grupo 23, provocado por Sergio Szpolski y Matías Garfunkel, trajo aparejado el abandono de 800 familias. El peligro actual siguen siendo los puestos de trabajo. «Pedimos una garantía de la continuidad laboral ante la inminente licitación ya que el pliego no establece una obligatoriedad para que el nuevo oferente mantenga al actual personal de la planta”, señaló Martín Cangini, uno de los delegados de América, con miras al llamado a concurso de la frecuencia.
“No podemos entender cómo el ministro de Trabajo Jorge Triaca aún no nos otorgó los famosos subsidios que deberíamos estar cobrando desde hace dos meses”, puntualizó Cangini, remarcando el abandono privado-estatal.
Tiempo Argentino
El vaciamiento del Grupo 23, y la situación de Balkbrug SA, editora de Tiempo hasta febrero, y Desup SA, titular de Radio América hasta septiembre, expuso las pocas garantías de los derechos de los trabajadores. Luego de las amenazas, de los intentos de intervención, de la represión, apareció Mariano Martínez Rojas, presunto nuevo comprador de los medios, exigiendo el desalojo de los trabajadores de Tiempo, convertido en cooperativa, con el fin de dar una respuesta colectiva a la desidia patronal. El ataque mafioso sufrido el pasado 4 de julio llevó la problemática hasta la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, quien se interiorizó del tema.